¿Por qué las etiquetas electrónicas para supermercados están ganando terreno en toda la GDO?
El mercado de las etiquetas electrónicas vive actualmente una gran expansión: Markets and Markets prevé que el mercado de las Electronic Shelf Label (ESL), en español etiquetas electrónicas para estanterías, experimentará una rápida expansión en el período 2021-2026, pasando de una facturación de 826 millones de dólares a 2.009 millones, con un crecimiento de la tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR, por sus siglas en inglés) del 20,4 %.
(Fuente GDOWeek)
La tendencia, por lo tanto, no es pasajera y no es solo típica del mercado español, sino un verdadero movimiento internacional en el que toda la GDO se mueve a un ritmo rápido. ¿Alguna vez te has preguntado el porqué de esta dirección?
Hemos decidido escribir este artículo precisamente para explicar por qué invertir en etiquetas electrónicas para supermercados y comprender su verdadero valor que, por supuesto, va mucho más allá del precio...
La GDO de todo el mundo ha entendido desde hace tiempo que las etiquetas electrónicas no son simplemente etiquetas de tinta digital.
No es precisamente una vanidad puramente estética o de experiencia del cliente lo que empuja a los retailers a invertir en etiquetas electrónicas para sus supermercados.
Hay algo más.
El verdadero valor de las etiquetas electrónicas para supermercados
Las etiquetas electrónicas para estanterías son más que una etiqueta de precios de la pantalla digital; las etiquetas electrónicas suponen una auténtica revolución en la gestión interna de las tiendas de la gran distribución gracias a su practicidad.
Las etiquetas digitales se comunican «internamente» con el programa de gestión para facilitar las operaciones internas en cuanto a:
- Los datos del surtido
- Inicio/fin de una promoción
- Fecha de caducidad de productos alimenticios, cosméticos o medicamentos
- Promoción coordinada con otros dispositivos electrónicos de la tienda (como carteles, tótems, videowalls), o con otros puntos de venta
- Cambio de precios dinámico, sin los límites que impone la gestión analógica
Pensemos solamente en la gestión de los precios y en cuánto tiempo y cuántos recursos operativos requiere la aplicación de las ofertas: cientos de etiquetas que se deben crear, imprimir, sustituir manualmente y actualizar.
El impacto en el trabajo cotidiano es enorme, porque inmediatamente se obtiene:
- Optimización de los recursos humanos, gracias a la posibilidad de liberarlos de actividades repetitivas y manuales;
- Reducción de desperdicios, objetivo ético pero también económico, sobre todo cuando se trata de alimentos;
- Gestión completamente libre de los precios que se pueden actualizar de forma simultánea, selectiva o según criterios específicos incluso varias veces en un mismo día.
Conoce mejor las funciones de las etiquetas electrónicas en el artículo dedicado al potencial de la estantería digital.
Las etiquetas ayudan a vender más
¿Cómo comunicarse con el cliente final si todas las etiquetas electrónicas son iguales?
A esta pregunta, que hasta hace unos años era la mayor objeción contra la digitalización de la gran distribución, la innovación ha respondido con sistemas de comunicación visual que pueden estimular al cliente: ofertas y determinados tipos de productos (ecológicos, veganos o sin gluten, por ejemplo) se pueden destacar de forma clara y, sobre todo, eficaz.
También se pueden integrar soluciones como videoinfopoint, tótems y otros sistemas de señalización digital.
Etiquetas electrónicas para supermercados: la solución al aumento de los costes
La digitalización de las estanterías de las tiendas, hipermercados y supermercados pero también de otro tipo de puntos de venta como tiendas de mascotas, farmacias, tiendas de electrónica y calzado, conduce a largo plazo a compras más rápidas y mayores beneficios gracias a una mejor gestión de los costes internos y una mejor organización de los recursos. En un contexto como el actual, la gestión de los costes es el único as en la manga posible para evitar que se vean aún más afectados los márgenes de beneficio y, lo que es igual de importante, poder mantener precios competitivos.
El ejemplo de Conad, pionero italiano de las etiquetas electrónicas para supermercados
El grupo Conad Nord Ovest está llevando a cabo un proyecto de digitalización que empezó en 2017.
Esto ha llevado a la colocación de las etiquetas electrónicas Nicolis Project en más de 250 puntos de venta de la red.
En el caso del grupo Conad, el desarrollo del proyecto digital se ha centrado en los usos en los procesos de posicionamiento de la comunicación promocional y en la gestión del control de las fechas de caducidad.
Lee aquí el estudio completo sobre las etiquetas electrónicas para Conad.
Como resulta evidente, la digitalización de los puntos de venta en estanterías requiere acciones dirigidas a objetivos y calibradas dependiendo de las funciones necesarias. Por esta razón, antes de empezar con la digitalización, conviene siempre hablar con un experto sobre tus objetivos. ¿Quieres una opinión sobre tu situación? Ponte en contacto con nuestros expertos.
ELEGIMOS LAS ETIQUETAS ELECTRÓNICAS MÁS ADECUADAS A TUS OBJETIVOS
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